pocas veces me pregunto qué hay más allá del universo
donde los planetas son insignificantemente pequeños
y mi existencia es cuestionable en el espacio y tiempo
me suele suceder cuando pienso en esa noticia
que no quiero que llegue nunca
y que sin embargo, llevo esperando toda la vida
y un martes cualquiera, sucede
es un instante a partir del cual
todos los que eran tus "supuestos problemas"
pasan a un segundo plano borroso y gris
algunas personas que rodeaban tu día a día, se vuelven fantasmas
hablan pero no las oyes
se mueven pero no las ves
tus preocupaciones se diluyen en el pasado
para dejar espacio a tu futuro gran trauma
que ni siquiera ha empezado todavía
me consuelo confiando en que el destino tendrá para conmigo
la misma piedad que yo he tenido siempre, la misma comprensión
la misma paciencia
con la que me he tomado todo lo que NO me tenía que pasar
me intento convencer una vez más de que todo ocurre por algo
para encontrar un resquicio de esperanza dentro del miedo
aunque no estoy asustada
es sólo que como nunca me enfado
ahora tengo tanta ira acumulada
contra el azar, contra la casualidad
contra 'lo que tenga que ser será'
un dolor anestésico que no me deja pensar en nada que no seas tú
si pudiera cambiarme por ti...
devolverte la vida que me has dado sin pedirme nada a cambio
de este mundo yo ya no necesito nada
que no sea tu felicidad
el resto se ha vuelto prescindible
mucho
