24.2.08

cosas que nunca te dije


29.05.07

"Puedo decirte que te quiero tantas veces como seas capaz de escucharlo, pero eso tan sólo nos recordará, que el amor no fue suficiente."

También mañana recordaré el día que te conocí, yo echa polvo entre irónica y desolada, tú tan radiante y tan sonriente que me hiciste también sonreír a mí. Aunque no me quedaban ganas. Me dijiste que después vendrías a verme, y yo que siempre he pisado sobre la tierra me convencí que la historia debía terminar ahí. Pero cual fue mi sorpresa cuando a las cinco de la mañana apareciste, te pegaste a mí y decidiste estar a mi lado hasta hoy.

Me lo has dado todo.

Pero hoy, el maldito dinero, la desconfianza y la no-comunicación me han quitado un trocito de ti. Ahora entiendo a quien ha rechazado mi amistad porque sólo quería mi amor.

Duele mucho.

Vivir sin ti, sin tus caricias ni tus besos. Sin nuestra banda sonora.


Duele tanto, vivir en la crónica de la muerte anunciada de nosotros dos, esperando a que llegue la llamada del “tenemos que hablar” y a que tarde o temprano soltemos eso de que tenemos que tomarnos un tiempo (seguramente ilimitado). Quizá la peor decisión que podamos tomar. Luego vuelvo al oscuro lugar donde me he escondido durante años, donde mi caparazón, mi ego y mi amor propio me convencían de que en el mundo sólo estaba yo y eso era lo único que debía preocuparme. Claro que entonces no sabía todo lo que tú me has enseñado. Y ahora ese lugar que antes tanto reconfortaba a mi orgullo y a mi dignidad, sólo me da frío.

Y sólo tu eres capaz de darme calor.

Yo no sé mucho sobre la vida, he intentado aprender de todo siempre que no he estado demasiado cansada. Me tiro en el sofá y me quedo paralizada, no se si estoy muerta o estoy matada. No se si la distancia une, o si la distancia mata. La única conclusión que me queda la resume una frase de una mala película que encabeza estas tristes líneas.

24.02.08

Hay personas a las que he alquilado parcelas de mi corazón por un tiempo finito. A ti te lo vendí todo a cambio de tu cariño.

Escriturado está en el libro del olvido, como el destino.

Y lo hice a conciencia, porque sólo tengo una vida.

Han pasado casi 9 meses desde la última vez, volver a sentirte dentro de mí esta mañana (dos veces) me ha destrozado. Pero no tanto como volver a ser La Otra mientras me juras que me quieres y me besas las heridas. Mientras me llamas "mi amor" entre lágrimas, mañana se lo llamarás a ella. ¿Te das cuenta que siempre me dices eso de que tienes novia, en la misma cama? Me he despedido de ti igual que el día que te conocí, echa polvo, entre irónica y desolada. Por la desesperanza, por el dolor, por el sudor que has dejado en mi piel y por las tostadas.

Ojalá no te hubiera conocido nunca...


No hay comentarios: