22.2.06

somebody else's dream


Cada uno vive la vida a su aire, los inteligentes como quieren, los demás como pueden.
Y tu siempre has sido muy metódica.
Te armas de valor para intentar dialogar una vez más con la misma pared. O esa sensación te queda después de largas horas de resistencia a la verdad. Lágrimas contenidas, desesperante prudencia… Algo para lo que no te da la gana estar preparada, porque hace mucho que dejaste atrás los doce años. La insolencia, el desdén, el despotismo absoluto de mentes como ladrillos que por alguna razón queremos a nuestro lado. Los sueños de los demás se convierten en nuestras pesadillas hasta que no puedes más y te sientes Big in Japan. Nosotras, que no somos como las demás, luchamos por conseguir todo con nuestro propio esfuerzo y nosotras, que no somos como las demás luchamos porque todo sea como queremos y ante la imposibilidad de disfrutarlo todo, NO nos dejamos llevar.
Y ahora te ahogas. Con todo el agua por encima de la cabeza haciendo tanta presión que se agotan las ganas de salir a la superficie.

“Y no respiro.
Por no hacer ruido.”


Pero dont worry nena que al final, “se traspasa” la pared y dicen que la paciencia empieza con lágrimas pero al final sonríe. Y aunque somos exigentes, que nunca se nos olvide, que cualquier día que pasamos por encima de la tierra y no por debajo…
es un buen día.

Ácida S.

Escuchando Iron Butterfly - In a gadda da vida

15.2.06

le divorce



(Optimus Prime)

“Me encantan los divorcios, sobretodo en los que hay niños de por medio, las guerras de celos, los platos estampados contra la pared. Las custodias, los abogados barrigudos y sudorosos con los papeles mal doblados. Los gritos por teléfono, la factura de una noche de hotel cargada a la cuenta común. Un ticket en el bolso de un perfume que no es el mío, las malas contestaciones…, pruebas de paternidad, indemnizaciones, procuradores, separación de bienes y mujeres que se quedan con empresas, coches y pisos… Bajas por depresión. Mudanzas. Volver a casa de los padres. El chalet. Los perros. Y el hijo de puta del vecino diciendo que bajes la voz y que a nadie le importan tus problemas.
En mi familia todas las parejas posibles, abuelos, tíos, padres, primos, están divorciados, he escuchado atentamente sus historias, cada una de las versiones, sus sufrimientos.
Y yo disfruto.
Me lleno de sus vivencias para separarme día tras día del amor, de eso que todo el mundo intenta, de eso que se habla, de eso que se pierde… en definitiva. De eso que no existe. Para un ser humano sólo existe UNO MISMO. Todo lo demás… es sólo un contexto.”

Cada vez que te escuchaba hablar, me quedaba como un tonto, atónito con tu siniestra madurez, que escondía tu carita de ángel. Maldita seas. Yo buscaba alguien especial, y vaya si te encontré. Ahora sí creo que el ser humano siente apego por todo aquello que le destruye. Por que tú me despedazaste la poca esperanza que tenía puesta en nuestra historia. Cuando después de todo lo que me aguantaste un día decidiste olvidarte de mí y de todo lo que sentías. Que jodida eres. Lo conseguiste. Tu puto orgullo de mierda y porqué no, tu inteligencia, pudo más que tu amor por mí. Y la niña de mis ojos con la que nunca fui suficiente hombre como para darla mi cariño, de repente dejó de ser amable, dejó de estar ahí y de la noche a la mañana, valiente desgraciada, me abandonaste para siempre. O eso me hiciste creer. Y después de un tiempo vuelves a mi vida por goteo, un día una noticia tuya, otro día un recuerdo y casualidad por casualidad, no sé porqué pero te llevo dentro.

Maldita seas.

Ya sé que si las cosas hubieran sido de otra manera, no habrías sido tu, y no quisiera, no quisiera tener que compartirte nunca más cuando fuiste mía, ni tener que olvidarte cuando eres lo único que me apetece recordar. Yo lo que quiero es volver atrás y vivir un bucle, que cuando se acabe nuestra historia podamos volver a empezar, y que lo de antes y lo de después nunca exista para nosotros.

Tan lejos y tan cerca.

Ácida S.

Escuchando "La Vereda de la puerta de atrás" - Extremoduro

8.2.06

japi flay


Hoy he visto por fin en tu cara una sonrisa. Qué digo! Era una carcajada.
Y te la he provocado yo.
Ignoraba que tu piel rozaba esa flexibilidad, ignoraba que tus labios, podían tener otra pose distinta, que la de la tristeza.
Han sido muchos meses ya, viendo tus ojos empañados, tus manos temblorosas, escuchando tus dudas a través de tus silencios. Tus gritos, tus confesiones. Qué desperdicio de lágrimas, que falta de tacto por parte de tu cuerpo, el no dejarte expresar más que los desastres, que rodean tu humilde existencia.
Carita de pena, no te preocupes, que si algo puedo enseñarte es a valorarte a ti misma con el mejor humor del mundo. Y me deshago en payasadas, en ironías de la vida, en fonemas imposibles que nos hacen perder el sentido del tiempo y la importancia de las cosas que son urgentes.
Antes que nada.
Antes que nada tu alegría, y luego ya veremos si nos quedan ganas para la seriedad y los cumplidos. Tantas cosas que decirte que no sé como empezar. Despliego todo mi ingenio, descubro cosas de mí misma que no sabía que tenía. Poca vergüenza.
Sólo me ha hecho falta recurrir por un momento a mi época más hardcore para soltarte lo más macabro que se me ha pasado por la cabeza. Y te has reído, apoyada contra la pared con la mano en el estómago y con una expresión en la cara que no era tuya, sino de alguien que hace mucho había vivido dentro de ti.
Tu misma.

Ácida S.

5.2.06

Only love can break your heart.



O eso decía el hombre del corazón de oro, allá por Agosto de 1970, cuando yo no estaba ni pensada, en after de gold rush y después de haber compartido su melancólica voz con Crosby, Stills y Nash. Cuando aun me quedaban muchos años para venir al mundo, crecer …
… y sufrir.
Se dice, se comenta, se rumorea… que todo el mundo ha tenido alguna vez en su vida un desengaño amoroso y hablan de “la hostia que me dio el amor”. A mi el amor me dio una paliza y me dejó en coma para el resto de mi vida, sintiéndolo todo como una película muda en blanco y negro, sin paisajes.
Ni guión.
Y escucho voces que retornan a mi vida que me resultan familiares de otra época y no quiero recordar pero recuerdo, es un sabor agridulce de lo que ya no tengo porque ya no quiero. Y un poco de limón en la herida.
Será que cada vez soy más mayor y le tengo menos resistencia a mi corazón y más a mi cabeza, que lleva años dirigiendo mi vida sin escuchar lo que el resto del cuerpo le tiene que decir:
Que estoy cansada
Que no puedo más.
Llevo casi 25 años en el bando de la rebeldía, de la trasgresión al “medio”, de todo lo macabro, y hoy me levanto sin haber pegado ojo y no tengo otra cosa que decir más que : ABANDONO. Me lanzo a mi suerte contra el mundo y que sea lo que Yo quiera. Un poco menos de carne y un poco menos de guerra, resquicios de querer jugar a ser mayor sin haber guardado del todo las muñecas, sin haber leído suficientes libros yo que sé, sin haber pasado suficientes pruebas. Y eso quien lo mide? Ahora retorno a mi infancia, ni siquiera a mi adolescencia, y retomo el run run, ese ritmo lastimero que me mueve hacia la vida perfecta que siempre he tenido: Yo, yo misma e Irene.
Dime, are you passionate?

Ácida S.

Escuchando: "Heart of gold" - Neil Young